miércoles, 8 de enero de 2014

'Su mirada es eterna, una mirada que nunca muere'

'Día a día me fui volviendo más melancólica, indiferente hacia los sentimientos ajenos. Siento que estoy malgastando mi vida esperando a alguien que jamás regresará. Es mejor no sentir nada, tener el alma vacía.'
Cuando tus ojos se abren, miras a tu alrededor; te encuentras entre las sábanas de esas habitación. No diferencias la luz de la mañana. Piensas con precisión en que te deparará este nuevo día que nace. La vida no es un sueño, y te encuentras sumergida en los recuerdos. Solo quieres huir con la ayuda necesaria, cualquier razón te vale, tan solo quieres escapar. Diles que se callen, porque tu vida comienza cada día cuando tus ojos se abren. Y aquí está, la rutina; te visita el doctor, tus miedos se disparan, comienzas a temblar y tu vida se acelera. Pero tu coraje sigue al frente, sigues siendo tan valiente. Los médicos no saben la respuesta a ciencia cierta; quizás sea un mes o quizás tan solo días. Piensas: 'Esto no tiene cura...' Y tu vida se desborda. Lágrimas derramas, no hay nadie que te entienda, ves que sigues solas cuando miras alrededor. Abandonas el hospital, todo está perdido. Miras hacia las nubes intentando ocultar todo aquello por lo que sufres. Sonríes, piensas en como será ese día en que todo se llene de oscuridad... ¡LIBERTAD! Gritas. Nadie sabe lo que sientes, ¿quién pidió un destino tan incierto?
'Tengo miedo, miedo a saber que pasará después de mi muerte. Tengo miedo al más allá...'
Su mirada es eterna, una mirada que nunca muere.
 No es pena, es el giro a la deriva de una chica.

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